La Adelfa (Nerium oleander) es conocida en determinados círculos como la azalea mediterránea. Es una planta de flor muy popular en el área mediterránea, utilizada en jardines públicos, privados e incluso es una de las más populares que podemos ver plantada en las medianeras de las autopistas.

Su familiaridad en el paisaje, en ocasiones hace que no se valore como se merece esta florífera planta. Aunque esto no es así en todos los sitios. En el norte y centro de Europa por ejemplo, es considerada como una atractiva planta de interior de flor y de ahí su referencia como la azalea mediterránea.

¿Por qué? Pues porque con la llegada del verano, millones de turistas eligen como destino a nuestro país para disfrutar de sus agradables temperaturas, largas horas de sol y las cálidas aguas de las playas. Curiosamente, mientras circulan por las autovías, la Adelfa les acompaña como parte del paisaje, también las ven en barrancos, en rotondas, en jardines públicos y privados, etc.

Así, no es de extrañar que estos visitantes, cada vez que ven estas plantas, las asocien con el buen clima y el tiempo de ocio. Bajo esta premisa, hay viveros españoles que cultivan el Nerium oleander para ser comercializada en estos países como planta de interior.

Las posibilidades de utilización de la Adelfa en nuestro jardín son enormes. Las podemos plantar en alineación utilizándolas como planta para setos; una sola planta aislada para crear un gran arbusto de flor que participe activamente en la arquitectura del jardín; en grupo para crear masas vegetales floridas; en jardineras o maceteros como puntos de flor en la entrada de casa, en balcones o terrazas…

Si a todo eso le sumamos que disponemos de un gran surtido, tanto de flores dobles, semidobles como sencillas, en una amplia gama de colores puros como los clásicos rojo, rosa, salmón y blanco… además de sus gamas de tonalidades, y que es una planta que soporta muy bien las podas, sus posibilidades de utilización nunca se acaban.

En su Centro Comercial de Jardinería en Valencia Albogarden, las encontrará en diferentes tamaños y en un amplio catálogo de colores. Cada maceta suele tener dos o más esquejes de plantas con varias ramas cada una de ellas, creando en su conjunto una planta densamente poblada.

La Adelfa florece en dos épocas del año: una en primavera y otra a finales de verano Su poda es conveniente realizarla tras esta última floración, para que con la llegada del buen tiempo primaveral, florezca abundantemente sobre los tallos del año anterior.

Cuando utilicemos la Adelfa como planta aislada, podemos elegir cualquier color deseado. En cambio, cuando la utilicemos en grupos o en setos, recomendamos utilizar un mismo color para realzar la fuerza del mismo.

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