Plantas trepadoras de interior
Las plantas trepadoras de interior configuran un grupo ornamental más grande de lo que en un principio se puede pensar.
Al igual que un jardín o terraza no está completo sin la presencia de una o más plantas trepadoras, en el interior ofrecen la posibilidad de decorar espacios imposibles con otro tipo de plantas.
Hay quien cree que son difíciles de cultivar, complicadas a causa de su naturaleza no autónoma y de la necesidad de estructuras destinadas a sostenerlas, como tutores, emparrados, etc. Esto no es así, son verdaderas supervivientes.
En su Centro Comercial de Jardinería Albogarden en Valencia, puede encontrar plantas trepadoras de interior con flores, como por ejemplo el Clerodendrum thomsoniae, Stephanotis floribunda (Jazmín de Madagascar) o la Hoya carnosa (Flor de cera).
También el amplio grupo de plantas trepadoras de interior decorativas por sus hojas como el Asparagus plumosus (Espuma de mar), el Cissus antarctica (Vid canguro), el Cissus rhombifolia (Ciso, Roiciso), el popular Epipremnum aureum o Scindapsus aureus (Potos o Ecindapso), el Ficus pumila o Ficus repens (Ficus tapizante), una amplia colección de Hedera helix (Hiedra rastrera) con hojas de diferente forma y variegados, el Philodendron scandens (Filodendro)… o el resistente y vigoroso Syngonium podophyllum (Singonio).
Entre las plantas trepadoras de interior, se pueden incluir algunas de exterior como es el caso de las Dipladenias y Allamandas, que aunque su espacio más adecuado es el exterior, podemos disfrutar de ellas durante varias semanas en el interior de nuestro hogar. Una vez que la falta de luz haga disminuir su floración, podemos plantarlas en el exterior, consiguiendo una nueva etapa ornamental que puede durar muchos años.